¡Sí! sólo el día de hoy y sin ningún tiempo para perder.

Si me quejo pierdo, ¡sí!… pierdo vida, para vivir.

Si me lamento pierdo, pierdo vida,… vida para ser  feliz

Si odio pierdo, pierdo vida, vida para sentirme en paz

Si estoy triste pierdo, pierdo vida, vida para sonreír y de la vida disfrutar.

Si tengo miedo pierdo, pierdo vida, vida para amar.

Si me deprimo pierdo, pierdo vida, vida para desarrollarme y crecer.

Si dudo pierdo, pierdo vida, vida para llenarla con fe y esperanza.

Si me angustio pierdo, pierdo vida, vida para emplearla en el bien.

El pasado y el futuro son solo fantasías, pues nadie vivió ni vive en ninguno de los dos

Por ello se que sólo tengo 24 horas para vivir, no más

¡Sí! sólo el día de hoy y sin ningún tiempo para perder.

Además soy un condenado a muerte, estoy desahuciado, desde que nací, y ¡sé que he de morir!

Así  que no puedo darme  el lujo de lapidar lo único que tengo: ¡vida para vivir!

De Poemas a Mi Ego de Eduardo Buenaventura Díaz