"No os apresuréis a confesar a alguien que le amáis. Es vuestro amor el que os hace felices, el que os da el impulso, el sentido de la vida; pero como el ser que amáis todavía no es una criatura perfecta, si conoce vuestro sentimiento, corre el riesgo de estropearlo todo sin querer. Dirá: «He aquí una puerta abierta, venga, aprovechémonos.» En efecto, es natural. Cuándo sintáis que no habéis sido comprendidos, sufriréis, os sentiréis decepcionados, y entonces, ¿qué quedará de vuestro amor?
Comprended que lo importante es el amor, más importante que la persona a quien amáis, así pues no vayáis a sacrificarlo ante alguien que corre el riesgo de destruirlo si cometéis el error de revelárselo. Podréis hablar de él cuando estéis muy preparados, os sintáis muy fuertes, y la otra persona también.
Pero mientras tanto, no digáis nada, continuad amando, porque es vuestro amor el que os alimenta, el que os da el impulso, las ganas de vivir, el deseo de superar todos los obstáculos. Así pues, no lo perdáis."
Omraam Mikael Aivanhov
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